Sentirse culpable, pensar en el suicidio, estar triste constantemente, no poder dormir bien o dormir en exceso, sentirse desmotivado por actividades que antes disfrutaba, experimentar disminución del apetito y estar irritable, son parte de los síntomas que experimenta una persona con depresión, una afección mental que no respeta edad, género o condición social.
Existen dos grandes tipos de depresión, así tenemos: La depresión endógena que trae como consecuencia una disminución de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, responsables del estado de bienestar, y la depresión exógena, causada por duelo, divorcios separaciones, eventos traumáticos ligados a la violencia, desempleo y problemas económicos.
Pese a que muchas personas con depresión suelen vivir durante años con esta afección e incluso llegar a pensar que nunca lograrán vencerla, no todo está perdido ya que si el paciente tiene el acompañamiento profesional adecuado puede tener mejoras significativas. El asesoramiento psicológico, el uso de medicamentos y terapias alternativas como Neurofeedback, pueden ofrecerles resultados permanentes para tratar la depresión.
Aquellos pacientes que deseen apostar por un tratamiento con 80% de efectividad comprobada científicamente para tratar la depresión, y que no requiere del consumo de fármacos, pueden realizar Neurofeedback, una terapia computarizada que no causa ningún daño al cerebro y consiste en conectar electrodos al cuero cabelludo para modificar la actividad eléctrica cerebral en tiempo real y el curso de los neurotransmisores, a través de un software especializado que implica el uso de estímulos audiovisuales -música o películas-.
A partir de un examen de Mapeo Cerebral, una prueba que nos permite ver en tiempo real el funcionamiento cerebral para determinar que áreas del cerebro están afectadas y generar un protocolo individualizado para hacer el entrenamiento cerebral de manera eficiente, inicia el proceso de terapias de Neurofeedback; por lo general un paciente con depresión requieren de 30 sesiones, sin embargo, y dependiendo del tipo de afección algunos pacientes que realicen terapias de Neurofeedback también requieren de acompañamiento psicológico.
Con Neurofeedback la persona aprende a cambiar la actividad de su cerebro modificando el patrón de ondas responsables del estado depresivo; los cambios en el cerebro se producen por entrenamiento y repetición de patrones de funcionamiento, inicialmente se requieren de dos sesiones semanales para producir cambios más rápidos y duraderos.
Neurofeedback es una terapia respaldada por organismos internacionales como la Asociación Américana de Psicología que es la asación de psicología más importante a nivel mundial. Anímate a probar la efectividad de Neurofeedback, un tratamiento de alta efectividad para el funcionamiento cerebral y una mejor calidad de vida. Fin Prensa Higea Salud y Bienestar-Danelys Mesa.